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Pashminas y fulares

Los fulares, bufandas o pañuelos para el cuello, también denominados pashminas, son uno de mis complementos de moda favoritos. Ideales para tapar el cuello, son perfectos para dar un toque elegante o sport dependiendo del atuendo elegido, por muy simple que éste sea.

Son perfectos para cualquier combinación de ropa. Con look monocolor, vaqueros o ropa de fiesta, un pañuelo para el cuello, ya sea largo o corto, puede añadir un toque de estilo y sofisticación a tu manera de vestir.

Sin embargo, pocos conocen que el fular, además de ser el complemento de moda perfecto, tiene también un claro componente terapéutico, vistiendo de color y glamour las pequeñas (o grandes) inconveniencias de un tratamiento médico, quimioterapia oncológica o incluso las derivadas de una intervención quirúrgica en la zona del cuello, entre otras.

El fular (denominación cuyo origen proviene de la palabra “foulard” en francés) se utiliza comúnmente para tapar el cuello y proteger la garganta frente a posibles faringitis, afonías o procesos catarrales. Pero además, los pacientes medicados con inmunosupresores, con tendencia a la bajada de defensas, pueden utilizarlo también para cubrir discretamente la boca cuando se encuentren en lugares concurridos, donde existe una tendencia natural a la sobreexposición a virus, gérmenes o bacterias, haciendo las veces de mascarilla protectora sin resultar molesto ni demasiado llamativo.

Para los pacientes en tratamiento con Imatinib (GLIVEC) por GIST, entre cuyos efectos secundarios se encuentra la intolerancia al frío, un pañuelo o fular es siempre indispensable. Además de proporcionar calor, es un complemento ligero y cómodo de llevar, que cuando resulta innecesario puedes meter en el bolso con toda facilidad, y utilizarlo a demanda.

Tras una intervención quirúrgica que afecte a la zona del cuello, ya sea por enfermedad tiroidea, bocio o una simple extracción dental, un gran fular atado al cuello, además de ejercer de protector de la zona intervenida, sirve para ocultar la posible cicatriz residual tras la operación, protegiéndola de la acción solar o de las miradas de manera muy discreta.

Bufanda, sombreroPara aquellas pacientes cuyo tratamiento oncológico provoca la caída del cabello, como determinadas quimioterapias, un pañuelo multicolor, con vivo estampado, bien atado a la cabeza, oculta la calvicie temporal a la vez que añade a tu aspecto un toque bohemio-chic. Como alternativa a las pelucas, sobre todo en verano y momentos de calor, resulta de lo más adecuado. Hay múltiples formas de ponerlo, pero para mí la mejor es la que cubre el cuero cabelludo acabando en un nudo, simulando una falsa coleta.

Frente a las exposiciones solares de larga duración, un gran pañuelo de algodón colocado sobre el pelo sustituye al sombrero de paja o a la típica gorra. Esta solución libera del calor, protegiendo de posibles insolaciones a niños y mayores. Si lo combinas con el mismo tono del bañador, es el look perfecto.

Todas las marcas de renombre comercializan fulares y pashminas, con multitud de precios o colores. En Zaragoza, a mí me encantan las de la tienda TODO PASHMINAS, porque disponen de un amplio catálogo de pashminas, bien sean de sport, fiesta, bufandas e incluso fulares para caballero. Tienen la mejor selección de pashminas y fulares al mejor precio, desde 5 €, por lo que puedes darte un capricho y solucionar tu problema sin necesidad de hacer un gasto desmesurado.

Por eso, y gracias a los fulares y pashminas, y a pesar de tratamientos, intervenciones o simples desventuras, puedes continuar estando, como siempre, ¡más que guapa!

 

EL PRODUCTO: Fulares o pashminas de TODO PASHMINAS, sita en la Calle Alfonso, nº 32, Zaragoza. PVP: Desde 5 €. Web: Todo Pashminas




Bailarinas, mi calzado favorito

Me encantan las bailarinas. Para todas las épocas del año, haga frío o calor, vestida o más informal, es mi calzado favorito. Te llevan a todas partes, se adaptan al pie como un guante, y su fácil quita y pon los convierten en el calzado por excelencia.

Cuando estuve en el hospital, intenté no perder el glamour, a pesar de las dificultades. Al menos eso comentaban mis amigas, que venían a verme y a entretenerme cada día, y con las que, aunque resulte increíble, me echaba siempre unas risas. Y es que cuando ingresas en un hospital, hay pocas cosas del exterior que te puedas llevar, y además que te puedan servir, ya que hasta el pijama te lo proporcionan allí. Ni siquiera puedes llevar las uñas pintadas, y evidentemente y salvo los cuatro indispensables de aseo, no necesitas nada más. Sin embargo, el calzado, eso sí que tienes que llevarte el propio.

Y entonces aquí está el dilema, ¿Qué zapatos se lleva una para estar un tiempo ingresada en un hospital? Y es que claro, la vida de un paciente ingresado es bastante aburrida. Normalmente y si te han intervenido, permaneces encamado el tiempo indispensable, pero luego, cuando llega el momento de levantarte, de dar tus primeros pasos, entonces necesitas apoyar los pies en el suelo. Y luego te pasean por todos los pasillos, entras y sales de los ascensores, te dirigen a los distintos Servicios y Especialidades para hacerte las pruebas diagnósticas preceptivas, y claro, eso ya es una salida de la habitación en condiciones, un paseo en toda regla. Es entonces cuando sí que necesitas un buen par de zapatos. Pero ahí llega la pregunta, ¿Cuáles?

Las opciones, aunque parezcan variadas, son bastante reducidas. Nunca me han gustado las zapatillas de estar en casa. Es más, normalmente llevo zueco, de los que llevan los médicos y enfermeras en los hospitales, que recogen y descansan el pie. Evidentemente, ese calzado no resultaba el más adecuado. Mi pijama de ingresada era parecido al que llevaba parte del personal sanitario, y ya lo que me faltaba parecer disfrazada, así que esa opción quedó directamente descartada desde el principio.

Después estaban las típicas zapatillas de tela sencillas, algunas incluso con lazo, monísimas por otra parte y muy adecuadas cuando das a luz pero muy poco prácticas para transitar por el hospital después de varios días tumbada. Y menos para que te lleven en silla de ruedas a hacer una radiografía, por ejemplo. Como pesan tan poco, ¡se podían perder por el camino!

Otra de las posibilidades eran las deportivas. Las zapatillas de deporte tampoco quedaban mal, pero sinceramente, bastante haces con levantarte de la cama como para empezar a agacharte y atarte los cordones. También descartadas.

Así que la mejor opción, por mucho que alguna de mis amigas todavía se esté muriendo de la risa, fueron mis queridas bailarinas. Bueno, ¡me hicieron un papel fantástico! Cómodas para quitar y poner, con suela estable para dar mis primeros pasos tras la operación, recogidas para deambular con la silla de ruedas recorriendo todo el hospital… En fin, ¡era el calzado perfecto para la ocasión!

Por eso, el consejo de hoy es «pon un par de bailarinas en tu vida«. Considero que las negras, lisas, básicas, son indispensables en cualquier fondo de armario, ya que combinan con todo y son comodísimas, elegantes y discretas para ir a cualquier lugar.

Unas de mis favoritas, son las de la marca GEOX, que ha reinventado con estilo el zapato que respira. En especial me encanta el modelo LOLA, que sin tacón, tienen una combinación de piel acolchada con charol de lo más acertada. Con un forro mezcla de cuero (90%) y textil (10%), su suela de goma perforada las hace verdaderamente comodísimas para cualquier actividad.

La novedad de este zapato es que en su interior está insertada una membrana especial impermeable y transpirante que permite la respiración de los pies impidiendo que el agua entre en el zapato y el pie se mantiene seco.

Son ideales, y como veis y para cualquier ocasión y en cualquier lugar, con vuestras bailarinas podéis estar, como siempre ¡Más que guapas!

El producto: Bailarinas GEOX, modelo LOLA.

PVP: 99,90 € aprox. Disponible en tiendas GEOX, puntos de venta autorizados, o en www.geox.com




Sombra de ojos en crema

Uno de los efectos secundarios de la ingesta de Imatinib (GLIVEC) es la hinchazón alrededor de los ojos, también denominado edema peri orbital. Ello convierte a la piel del contorno de los ojos en una zona de máxima sensibilidad. El edema se va reduciendo poco a poco conforme transcurre el día; es más intenso a primera hora de la mañana, al despertar, pero poco a poco se va reduciendo hasta desaparecer casi por completo.

Este efecto secundario no sólo es exclusivo del GLIVEC. Otro tipo de tratamientos, el uso de corticoides o simplemente el traspaso de la barrera de los cuarenta producen una mayor retención de líquidos en la zona que rodea los ojos, como los párpados, especialmente sensibles y los primeros en evidenciar la intolerancia a determinados productos de belleza.

Por eso, la elección de los cosméticos utilizados para maquillar el rostro es especialmente importante, y no podemos basarnos sólo en el precio a la hora de elegir lo más adecuado para colorear nuestros ojos. Con respecto a las sombras de ojos, en concreto, y para este tipo de problema, lo mejor es utilizar una sombra de ojos en crema, y no en polvo, ya que resultan más hidratantes, duraderas, y mantienen el párpado coloreado todo el día sin irritarlo ni resecarlo. Las sombras de ojos en polvo dan muy buen resultado, pero para los ojos hinchados o especialmente sensibles de los que estamos tratando, provocan una mayor sequedad en el párpado, e incluso pueden llegar a cuartearlo, anulando el efecto embellecedor pretendido con el maquillaje.

Mi propuesta de hoy y para aliviar este tipo de problema se llama PRO LONGWEAR PAINT POT, de MAC COSMETICS. Sometida a pruebas dermatológicas y oftalmológicas, es una sombra de ojos en crema de larga duración, que proporciona un color intenso que se mantiene inalterable durante casi ocho horas. No se mueve ni cuartea, por lo que resulta ideal para ojos extremadamente sensibles, con tendencia al lagrimeo constante o a los cambios de luz, tiempo o temperatura.

Tiene una textura muy suave, lo que permite aplicarlo bien con un pincel específico o simplemente con la yema de uno de los dedos. Su textura sedosa y cremosa permite difuminarlo muy fácilmente, consiguiendo con un solo toque la cobertura deseada. Eso sí, antes de hacerlo no hay que olvidar aplicar la crema de tratamiento para el contorno de ojos, indispensable para conseguir un cuidado y acabado perfecto.

Los expertos de MAC aconsejan que puede utilizarse sola, dando un resultado más natural, o también combinada con otras sombras o delineadores de ojos de la misma línea.

Disponible en 23 tonalidades, mi color favorito es el Frozen Violet, morado plateado escarchado, ideal para todos los estilos, porque resalta, sin endurecer, los ojos oscuros. El Bare Study o el Chille don Ice son idóneos para conseguir un resultado más natural.

Lo mejor es que tienen distintos acabados, dependiendo del efecto que queramos dar a nuestro maquillaje: desde el cremoso o escarchado hasta el perlado o satinado. Los escarchados, con acabado brillante, tienen efecto iluminador, lo que lo convierte en un producto dos en uno perfecto para el maquillaje diario. Los perlados y satinados tienen un acabado más discreto y natural, acercándose algunos de los tonos a la línea de maquillaje nude (o efecto cara lavada) que ahora está tan de moda.

Por este motivo, y si queréis dar color a vuestra mirada, a pesar de tratamientos, enfermedades o simplemente porque queréis estar bellas, añadiendo un punto de optimismo a vuestra vida, no olvidéis maquillar vuestros ojos, y de este modo seguiréis estando, como siempre, ¡Más que guapas!

 

EL PRODUCTO: PRO LONGWEAR PAINT POT, sombra de ojos en crema de larga duración de MAC. Envase de 5 gr. PVP: 20 €. En puntos de venta autorizados o en www.maccosmetics.es.




Importante el After Sun

La protección solar es importantísima para cuidar la salud de tu piel, y más en pacientes que la tienen especialmente sensible, o que padecen alergia o intolerancia al sol. Pero una vez que se ha identificado la crema solar adecuada, y se siguen las instrucciones de aplicación que garantizan un cuidado correcto, ¿Por qué siempre después de tomar el sol nos olvidamos de aplicar aquel producto tan afamado en su día como es el after sun o crema para después del sol, pero que hoy ha ido perdiendo cada vez más adeptos?

Desde que se ha generalizado el uso de la crema hidratante corporal, lo cierto es que la usamos prácticamente para todo. Que tienes la piel seca (sin cuestionarnos la causa), pues ahí va un poco de crema. Que tenemos la piel un poco más irritada, otra vez la loción hidratante. Que nos sale un sarpullido, vamos a probar primero con nuestra crema habitual. Vamos, que es una especie de remedio para todo cuando la piel no se encuentra en su estado óptimo, y evidentemente, pocas son las ocasiones en las que acertamos con este remedio.

Hay que tener en cuenta que cada crema tiene una finalidad. Los componentes cambian y se formulan dependiendo del tipo de piel a aplicar y la necesidad concreta a utilizar. Si después de una exposición prolongada al sol aparecen ligeras quemaduras, rojeces o irritaciones en la piel, ¿Por qué utilizamos el mismo producto que nos ponemos habitualmente para después del baño, si la circunstancia por la que está pasando nuestra piel no es la misma? He de decir que por tener la piel clara, y por la ingesta de GLIVEC tras el GIST, he sido de esas personas que utilizaban la crema hidratante como solución para todo, hasta que mi autocuidado se convirtió en una máxima y comencé a buscar remedio a cualquier contratiempo físico que se me planteaba, buscando el producto adecuado para cada necesidad.

Y así, hasta que comprendí que tras tomar el sol, por muy protegida que estuviera, mi crema hidratante habitual no era suficiente como para paliar los efectos de la exposición solar. Por eso, en los últimos días, he adquirido AFTER SUN LOTION de ISDIN, un producto fantástico que alivia e hidrata la piel al instante tras la un baño de sol.

Esta loción para después del sol, refresca la piel a la vez que alivia el ardor y el enrojecimiento producidos por el mismo. Con una sola aplicación, hidrata, suaviza y devuelve a la piel su tersura natural, y lo mejor: fija y prolonga el bronceado, evitando la descamación. Evidentemente, es una crema hidratante, pero además calma y refresca, lo, cual resulta ideal cuando por un pequeño descuido la crema solar se ha aplicado de forma incorrecta y nos hemos quemado ligeramente por el sol.

Su fórmula está testada bajo control dermatológico, y es apta para todo tipo de pieles. No contiene parabenos, ni es sensibilizante, por lo que puede ser utilizada por niños y adultos indistintamente.

Conviene aplicarla con la piel limpia y seca, dando un suave masaje con las yemas de los dedos, en especial incidiendo sobre las zonas afectadas por la irritación solar. Es preferible esperar a su completa absorción, aunque como se trata de una loción, permite extenderla rápida y cómodamente, por lo que se absorbe de forma inmediata.

A mí me ha encantado, porque además de haber mantenido mi piel hidratada después del sol, su efecto reparador ha sido sorprendente, así que se ha convertido en otro de mis indispensables en mi tocador. Por ello y tras un baño solar, he podido eliminar las molestias causadas por el sol a la vez que prolongo mi moreno, por lo que puedo seguir estando, como siempre, cuidada y mucho ¡Más que guapa!

EL PRODUCTO: AFTER SUN ISDIN LOTION, de Laboratorios ISDIN. Envase de 200 y 500 ml. PVP: 8-15 € aprox. dependiendo del tamaño. De venta en farmacias y parafarmacias.




Date un capricho

Cuando pasas por una experiencia traumática, enfermedad, pérdida de un familiar o tras un conflicto interpersonal tu vida cambia, y tu manera de ver las cosas se transforma considerablemente. Las patologías de gravedad son más agresivas, porque puede que conlleven secuelas, y que las mismas sean temporales o directamente pasen a ser definitivas. La ventaja es que en esos casos, valoras más lo que tienes, las pequeñas cosas, disfrutas mucho más de la vida de lo que lo hacías antes.

Para los momentos de tristeza o desazón, sea la causa que sea, el mejor remedio que hay para levantar el ánimo es darse un capricho. Darse un capricho (a uno mismo) significa dedicarse un poco de tiempo y regalarse algo que a uno le guste, por pequeño que sea, y que con eso disfrutes y te llenes de felicidad, aunque sea durante un corto periodo de tiempo. Para algunos será comprarse un bolso (no hace falta que sea demasiado caro) o unos zapatos (hay que ver lo feliz que se siente una cuando estrena algo nuevo), pero para otros un corte radical de pelo o simplemente comerse un bombón de vez en cuando son remedios suficientes como para esbozar una sonrisa.

El capricho, para que tenga efecto, no tiene por qué costar dinero. Para los que somos tratados con Imatinib (Glivec) y nos provoca intolerancia al frío, disfrutar de un rayo de sol que caliente nuestros huesos ya es todo un tesoro. Para los que han estado mucho tiempo encamados por una enfermedad, transitar por la calle o volver a casa, dormir en tu cama, es lo más. Pero para mí, el mayor de los caprichos y uno de los más baratos, consiste simplemente en contemplar el mar, con su enorme extensión, y notar el reflejo del sol sobre él.

Para superar un trance en la vida tengo ejemplos cercanos que sobrevivieron al mismo retomando viejas aficiones. Coser, tocar un instrumento, estudiar una nueva carrera o formar tu propio grupo musical son terapias que les han ayudado con éxito a dejar atrás el pasado y comenzar una nueva vida. Volver a hacer deporte, renovar tu vestuario o hacer obra sociales, dedicando tiempo a los demás, es uno de los mejores remedios para iniciar una nueva etapa con mayor intensidad que la anterior.

Pero quererse, uno no debe de dejar de quererse nunca. Y para quererse, uno debe de darse, de vez en cuando un capricho. Así que navegando por internet, he visto algunos caprichos asequibles que pueden gustaros mucho, y que en momentos de bajos pueden ayudar a subiro la moral, y a la vez poneros a la última, y estar este verano ¡mucho más que guapas!

 

1 ) SACA ASA CREMALLERA de ZARA, Ref. 4805/304. Tamaño 27 x 40 x 15 cm. PVP: 49,95 €. De venta en tiendas ZARA y enwww.zara.com 2) Sandalias planas de charol de MANGO, color nude. REF. 23047560. PVP: 15,99 €. De venta en tiendas MANGO o en www.mango.com 3) Vestido estampado volantes de MANGO. REF. 23007539 PVP: 19,99 €. De venta en tiendas MANGO o en www.mango.com
 Saca Zara  Sandalia Mango  Vestido Mango

 

 4) Helado HÄAGEN-DAZS, sabor Pralines & Cream. Helado de vainilla con nueces de Pecán caramelizadas y remolinos de salsa de caramelo. De venta en centros de alimentación autorizados o en Heladerías HÄAGEN-DAZS.Tarrina de 500 ml. PVP: 6 € aprox. 5) Chocolatina CRUNCH de NESTLE. Tableta de chocolate con leche y arroz inflado. Tableta de 100 gr. PVP: 1 € aprox.
 Helado Hagen Dazs  Crunch

 

 




Desmaquillador ojos sensibles

El cuidado de los ojos es esencial, y cuando se tienen más sensibles por cualquier causa, bien por genética o por alergias, medicación o una simple conjuntivitis, resulta imposible encontrar un buen producto que te ayude a eliminar los restos de maquillaje de forma eficaz y sin irritarlos. Si además añades el tratamiento con Imatinib (Glivec) la misión resulta ya casi imposible.

Hasta la fecha y durante años, he ido probando distintos productos sin mucho éxito; bueno, he de decir que finalmente encontré uno que se adecuaba mucho a mis necesidades, pero cuyo precio resultaba desmesurado en comparación con su duración. Sin embargo, y máxime permaneciendo con el tratamiento con Glivec y el edema peri orbital (hinchazón alrededor de los ojos) que en ocasiones provoca, no me atrevía a cambiar y probar uno distinto, dadas las nefastas experiencias que había sufrido en el pasado probando otros limpiadores.

Desde luego que resulta muy desagradable quitarte el maquillaje de los ojos y acabar con los mismos enrojecidos, pues acabas maldiciendo el hecho de habértelos pintado, con lo bien que se estaba sin picores y lagrimeo, si no te provoca incluso alteraciones en la visión. Y al día siguiente, y si la irritación no ha sido muy importante, vuelves a plantearte el hecho de volver a maquillarte, porque al final no sabes si es mejor el remedio que la enfermedad.

Y así, hasta que descubrí la LOCIÓN FLORAL DESMAQUILLANTE al aciano calmante, ojos sensibles, deLaboratorios KLORANE. Para los ojos con tendencia a la irritación es el producto ideal porque no contiene parabenos y tiene un pH idéntico al de las lágrimas, por lo que resulta de alta tolerancia para los ojos sensibles, incluso para los que llevan lentes de contacto, que exigen un cuidado más delicado.

Probada bajo control oftalmológico, lo mejor es que elimina el maquillaje con facilidad, no irrita los ojos y deja una agradable sensación de frescor. Ello es debido a que está formulado con agua floral de aciano, que calma, suaviza y descongestiona no sólo los ojos más sensibles sino también el contorno de los mismos, permitiendo un desmaquillado suave que elimina cómoda y rápidamente el maquillaje.

Además, su precio es más que ajustado (12 € aproximadamente) y su envase de 200 ml. hacen que puedas usarlo durante varios meses, lo que reduce considerablemente su coste. Con un ligero aroma floral y una textura líquida, similar a la del tónico facial, agiliza la incómoda tarea de desmaquillar, y que conforme avanza el día provoca más pereza realizar.

Para un resultado perfecto, los expertos de Klorane aconsejan su aplicación con un algodón y sin aclarado. Lo mejor es eliminar el maquillaje de los párpados procediendo del extremo interno del ojo hacia el extremo externo para un mejor desmaquillado sin irritar el ojo, y luego desmaquillar las pestañas, en dirección de la raíz a las puntas. No hace falta empapar el algodón con la loción floral; con unas gotas es más que suficiente.

Probadlo, os encantará, y con alergias, ojos sensibles, tratamientos o interacciones, buscad un maquillaje adecuado, aplicadlo, y luciréis ¡Más que guapas!, porque la hora de desmaquillar tus ojos ya nunca más será un problema.

EL PRODUCTO: LOCIÓN FLORAL DESMAQUILLANTE al aciano calmante, ojos sensibles, de Laboratorios KLORANE, Envase de 100 ó 200 ml. PVP 10-12 € aprox. De venta en farmacias y parafarmacias. www.klorane.es




Manta para el sofá

Cuando uno está convaleciente de cualquier enfermedad el trayecto a realizar en casa varía bastante poco: de la cama al sofá, y del sofá a la cama. El malestar general, escasez de fuerza y el frío en ocasiones hace que tumbarse en el sofá sea la mejor alternativa a continuar postrados en la cama. Ver la televisión, ojear una revista o simplemente mirar por la ventana son actividades que parecen de lo más entretenidas, y mucho más cuando la patología sufrida es de larga duración.

Es cierto que uno luego se va recuperando, poco a poco, y puede que recuerde con horror esos momentos de inactividad: momentos en los que el resto del mundo seguía con su rutina diaria, pero que para ti, estancada en el sofá, simplemente mirar por la ventana y observar a los viandantes era lo mejor que te podía pasar. También puede que lo recuerdes con cariño, eso si aprovechaste esos momentos de asueto para retomar aficiones perdidas como leer, coser, o simplemente meditar, y que el hueco que dejaste en el sofá en aquellos días se haya evaporado para siempre.

En mi caso el momento-sofá lo olvidé pronto; quizá porque mi sofá es grande, cómodo, y la compañía fue siempre divertida y entrañable. El sofá, por definición, siempre se comparte, y lo mejor en momentos de reposo es una buena conversación y, siempre y para una óptima recuperación, con una persona que te haga sonreír. Pero mientras estuve en él, “disfrutando” de mis ratos de descanso obligado, tuve mi mantita, de la que desde entonces y cada vez que me siento en el salón, no he podido desprenderme, y la vuelvo a coger una y otra vez con inmenso cariño, recordando esos momentos pasados de descanso y calor en buena compañía.

Por eso, y con independencia de la situación en la que os encontréis, os recomiendo la manta de forro polar de ZARA HOME. Ideal para el descanso, es suave, ligera, y con la intolerancia al frío que provoca el Glivec, medicación prescrita a los pacientes con GIST, es perfecta para entrar en calor mientras permaneces quieto en el sofá. La venden en tres tamaños, desde 130 x 170 cm, hasta 160 x 250, pasando por la más grande de 230 x 250 cm, pero para mí la ideal es la pequeña, la primera de ellas, porque es más que suficiente para cubrirte mientras lees un libro, ojeas una revista, ves la televisión, o simplemente estás de conversación.

Sus colores claros, desde el blanco al beige, pasando por el gris piedra, son ideales y combinan con cualquier sofá, aportando calidez al ambiente, lo que convierte tu salón en un lugar confortable y a la última. Su precio más que adecuado (desde 19,99 €) la hacen perfecta incluso como regalo a tus seres queridos, y si encima no se te ocurre nada que llevarles cuando están convalecientes ¡Este es el detalle perfecto!

¿No os habíais dado cuenta de que todos los bebés tienen su mantita? Con ella se sienten calentitos, protegidos y seguros. Cuando crecen su mantita les sigue a todas partes; y permiten que cojan el sueño en cualquier lugar, con independencia de dónde se encuentren. A los mayores nos pasa lo mismo, pero no queremos reconocerlo.

Sentarnos en el sofá con una manta, además de aportarnos calor, tiene multitud de utilidades terapéuticas, como tapar el abdomen para hacer una buena digestión. Si además tienes una piel sensible o atópica y no toleras lanas o acrílicos, es el complemento perfecto para un reposo con glamour.

Así que ¡Dí adiós a tu vieja manta de cuadros, y apúntate ya a la manta de forro polar! Y de este modo seguirás calentita, cómoda y acelerarás tu recuperación a paso de gigante, manteniéndote, como siempre ¡Más que guapa!

EL PRODUCTO: Manta polar de ZARA HOME. Tamaño 130 x 170 cm. PVP 19,99 €. De venta en establecimientos ZARA HOME o en www.zarahome.com.




Protector solar pieles sensibles

Durante un tratamiento médico es muy importante el cuidado de la piel, y más frente a la exposición solar. No sólo hay que atender el cuidado facial; también en el cuerpo se pueden ocasionar daños irreversibles si se toma el sol sin la adecuada protección.

Con una piel clara la sensibilidad a los rayos del sol es evidente. Por suerte y a tiempo, asesorada siempre por buenos especialistas, la protección solar y el cuidado de mi piel se ha convertido en una de mis máximas, pudiendo comprobar excelentes resultados en poco tiempo.

Y así, con mi afán de cuidar mi piel lo máximo posible, incluso la corporal, descubrí Fotoprotector ISDIN Pediatrics, Lotion Spray. Se trata de una Emulsión fluida en spray ideal para pieles que necesitan un aporte extra de hidratación. Pensé que en mi caso, con la medicación de Imatinib (Glivec) y la piel sensible que traía de serie, lo mejor era aplicarme una crema protectora solar para niños, ya que seguro garantizaba el máximo cuidado y protección.

Aconsejada por los profesionales de Farmacia Lahoz, acerté con esta lotion spray pensaba específicamente para la piel infantil, porque combina en un mismo producto la alta protección solar y la máxima hidratación con una cómoda aplicación. Testado sobre piel atópica, es altamente hidratante, muy resistente al agua y a la fricción.

Con un factor de protección muy alta, 50+, la protección frente a los rayos UVA y UVB es extrema, lo que evita quemaduras, rojeces, descamaciones o ampollas, daños que pueden ocasionar consecuencias irreversibles provocadas por la exposición al sol, así como alteraciones cutáneas debidas al mismo.

Con una textura fácil de aplicar, se extiende fácilmente con una agradable consistencia, y además está indicado para zonas extensas del cuerpo. Para un resultado óptimo, lo conveniente es aplicar generosamente una buena cantidad sobre la piel limpia y seca, media hora antes de la exposición solar, y volver a aplicarla cada dos horas aproximadamente, especialmente si se hace deporte, o después de transpirar, nadar e incluso secarse con una toalla. Ha de evitarse, eso sí y como con toda crema, el contacto con ojos y mucosas.

Como indican los expertos de Isdin, el lotion spray facilita una difusión continua, homogénea y en cualquier posición, consiguiendo una óptima aplicación en cualquier parte del cuerpo, incluso boca abajo, así como en las zonas de difícil acceso.

Además, esta loción, al estar formulada con antioxidantes y vitamina E, ingredientes que potencian su efecto fotoprotector, deja una agradable sensación de frescor y confort en la piel y lo mejor: un acabado sin brillos. Su exclusivo filtro UVA-UVB permite su aplicación sin dejar residuo, lo que lo convierte en un producto ideal para aplicar en la exposición solar al aire libre como en playa, piscina o montaña.

Está indicada para niños a partir de cero años, pero también puede aplicarse sobre todo tipo de pieles, si bien su ventaja es que está ideada especialmente para aquellas que son muy sensibles al sol, hiperreactivas al mismo o con alteraciones inmunológicas. Para niños son perfectas, pero para pieles sensibles, atópicas, o aquellos organismos sometidos a tratamientos médicos específicos, es sin duda la adecuada.

Yo la he probado y estoy encantada. A diferencia de otros productos, y a pesar de lo difícil que parece por mi tonalidad de piel, me ha permitido coger color, evitando las típicas quemaduras y rojeces, y lo mejor es que al tomar el sol protegida he conseguido un moreno uniforme, duradero, así como mantener una piel brillante, sana e hidratada, y a pesar de la medicación, seguir estando como siempre ¡Más que guapa! incluso tras la exposición al sol.

EL PRODUCTO: Fotoprotector ISDIN Pediatrics, Lotion spray. Protección muy alta, FPS 50+. 200 ml. PVP: 15-20 € aprox. Puedes encontrarla en Farmacia Lahoz, en C/ San Miguel nº 17, 50001 Zaragoza.




Solución al frío en casa

Uno de los efectos secundarios más habituales durante el tratamiento del GIST con Imatinib (comercializado como Glivec) es la intolerancia al frío. Al principio pensaba que se debía a la pérdida de peso, pero poco a poco y tras la búsqueda desesperada por buscar algún remedio, aprendí que se trataba de una consecuencia más de la medicación.

Dicen los expertos que el momento del día en el que el cuerpo permanece con la temperatura más caliente es al despertar, y recomiendan mantenerla durante todo el día con diversos trucos, como llevar varias “capas” de ropa, vestir indumentaria fabricada con Polipropileno (que es un compuesto químico que mantiene la temperatura del cuerpo y absorbe el agua de la piel, muy usado por los aficionados a las actividades al aire libre), utilizar ropa confeccionada con otras fibras sintéticas, o llevar calcetines gruesos para mantener el calor del cuerpo.

La verdad es que siempre he sido friolera, pero después del GIST la poca tolerancia al frío ha sido considerable. El uso de varias prendas superpuestas es una muy buena idea, pero en casa y para realizar las tareas del hogar no deja de resultar bastante incómodo.

Así hasta que descubrí las batas y parkas polares de la firma LOHE INTERNACIONAL. Perfectas para mi piel sensible, son amorosas y suaves al tacto, proporcionando y manteniendo el calor del cuerpo mientras estoy en casa. Además son tan ligeras que permite la plenitud de movimientos, y no molestan para realizar las actividades diarias de la vida cotidiana, a veces tan incómodas y que requieren actividad constante, como cocinar, planchar o poner la lavadora. Para eso necesitas una prenda que caliente pero sin que impida la libertad de movimiento que ello requiere.

Además, la múltiple variedad de tonos y colores permite combinarlas con cualquier tipo de prenda de estar en casa. En mi caso tuve la suerte de que fue un regalo de unos amigos muy queridos, que al conocerme bien eligieron la más acorde con mi estilo. La mía combina rosa, beige y tostado, pero también encontraréis un amplio surtido de estampados y colores que alternan el azul, blanco o gris perla, entre otros, así que podéis elegir la línea que más os guste. Lo ideal es combinar las dos prendas a la vez: la bata, al ser más larga, resulta más calentita para periodos de descanso o recuperación, pero la parka, un poquito más corta, permite la realización de las tareas domésticas con mayor agilidad.

Y lo mejor, ¡También hay para niños! Su nueva línea infantil permite vestir a nuestros pequeños con el mismo estampado, y conseguir además en ellos el mismo efecto pretendido: que permanezcan calentitos en casa pero que puedan jugar, mover y divertirse libremente a la vez. Y además resultan muy estilosas y combinan con cualquier prenda de dormir. ¡Tienen un estampado de estrellitas que me encanta para las niñas!

Una de las ventajas de estar convaleciente de una enfermedad de esta dimensión es el extremo cuidado que te prestan familiares y amigos. Todos ellos pendientes de mejorar tu calidad de vida, sacar la mejor de tus sonrisas y luchar

por conseguir lo que esté a su alcance para que tu recuperación sea rápida y mejor. En mi caso puedo presumir de que entre todos los míos me colmaron de regalos que hicieron mi vida más fácil y glamourosa a la vez. Todo el mundo se volcó para que mi vida volviera a ser la misma, a pesar de la tremenda montaña que me quedaba todavía por subir. Desde aquí me gustaría dar las gracias a todos ellos, que consiguieron con sus detalles hacer mi vida mucho más feliz y seguir, a pesar de la operación y el tratamiento, siempre ¡más que guapa! en todos los ámbitos de mi vida, en casa y sobre todo, fuera de ella.

EL PRODUCTO: Batas y parkas de forro polar de LOHE INTERNACIONAL. PVP: Desde 25,75 € para adulto, y 18,50 € para niña. De venta por internet en www.lohe.es o en www.loheshop.com.

 




Crema para el contorno de ojos hinchados

El edema peri orbital o hinchazón alrededor de los ojos es el efecto secundario más común entre los pacientes con GIST tratados con Imatinib (Glivec).

Por norma general, suele ser más severo por las mañanas, y va desapareciendo poco a poco conforme transcurre el día.

En mi caso fue más llamativo a partir de los dos primeros meses de tratamiento, y tras dos años y medio con Glivec se ha ido manteniendo en la misma línea. Al despertar los párpados están un poco más hinchados, y los ojos bastante llorosos, pero luego tras un buen lavado con agua y una crema de contorno de ojos adecuada, en unos minutos comienza a desparecer, hasta que pasada media hora sea casi imperceptible.

El tratamiento con Glivec, la sensibilidad especial de la piel del contorno de los ojos o una piel atópica hacen difícil acertar con la crema de contorno de ojos que solucione este problema. Algunas resecan demasiado, otras no logran reducir el edema, e incluso una elección inadecuada puede provocar alergias en la piel.

¿Qué crema uso para el contorno de los ojos hinchados?

Después de haber probado varios productos sin que ninguno me convenciera, al final descubrí que el contorno de ojos que utilizaba antes de la operación seguía siendo el más adecuado para solucionar o aliviar este pequeño inconveniente. Se trata de la CREMA DE CONTORNO DE OJOS Y LABIOS DE DAESES (laboratorios SESDERMA), que como su nombre indica, además sirve también para la zona de los labios.

Consiste en una emulsión ligera y de rápida absorción que alisa, reafirma y tensa visible e inmediatamente la piel del contorno de los ojos y los labios. Por su contenido en DMAE, produce un efecto lifting inmediato, alisando y mejorando la elasticidad de la piel alrededor de los ojos, cejas, párpados y labios. Su fórmula combina aloe vera, ácido hialurónico y ácido láctico, que sirven para hidratar y rejuvenecer la piel, atenuando las arrugas, elevando las cejas e induciendo unos labios más llenos y perfilados.

Tal y como se indica en la descripción del producto, por su alto contenido en Aloe Vera, aporta a estas delicadas zonas la hidratación necesaria para fijar el agua en la capa córnea, ayudando a restablecer el equilibrio hidrolipídico de la piel. Esta propiedad se ve reforzada por la acción del ácido hialurónico, el cual contribuye a retener el agua en los tejidos previniendo la deshidratación. El ácido láctico actúa como agente rejuvenecedor de la piel y estimula la renovación celular reduciendo las arrugas.

Adecuado para todo tipo de pieles, otra de las ventajas adicionales es su presentación en un envase de 30 ml (la mayoría de los contornos de ojos se comercializan con tan solo 15 ml), lo cual duplica su duración, lo que unido a su precio más que razonable (ronda los 35 € aproximadamente), hacen de este producto un indispensable entre los productos de cuidado facial.

El modo de empleo es esencial, ya que ayuda a potenciar las propiedades y resultados del producto. Para un óptimo resultado, lo mejor es aplicar la crema diariamente, tanto por la mañana como por la noche, utilizando la yema de los dedos y dando suaves toquecitos desde el interior hacia el exterior del contorno de los ojos. Para la zona del contorno de los labios hay que seguir el mismo sistema, y quedará perfecto.

Y un consejo más: Para aquellos momentos en los que el edema sea más intenso, probad a meterlo en la nevera y aplicarlo frío después. Así, notaréis un frescor y alivio muy agradables que disminuirá notablemente la hinchazón desmesurada provocada por la medicación.

Aparte de esta crema facial para la zona peri orbital, hay un simple truco que podéis utilizar y que os ayudara a camuflar este efecto de ojos hinchados si ninguna crema logra reducir este efecto: el uso de las gafas. Además de ser un complemento de moda perfecto, evitará que te percates constantemente de la hinchazón que el Glivec puede provocar, y junto con la crema seguirás y a pesar del tratamiento, siempre ¡más que guapa!

 EL PRODUCTO: Daeses Contorno de Ojos y Labios, de Sesderma.

Envase de 30 ml.COMPOSICION: dimetilamino etanol (DMAE) 2%. Aloe vera 50%. Ácido láctico 2,5%. Extracto de manzanilla 3%. Ácido hialurónico 0,1%. pH 6,5. PVP: 35 € aprox. De venta en farmacias y parafarmacias.