De este año no pasa. Este invierno pienso comprarme unas botas altas, de las antiguas mosqueteras (pero sin vuelta), también denominadas over the knee, o lo que es lo mismo, por encima de la rodilla. El año pasado estuve a punto de sucumbir a sus encantos, pero no encontré ningún modelo que se adaptara a mis gustos y preferencias.

Por norma general, las botas me gustan planas, sin tacón, y cómodas; de hecho exijo ante todo que sean muy muy cómodas. Estos tres últimos años y por la intolerancia al frío que me ocasionaba la ingesta de Imatinib (GLIVEC), he estado ideando cuidadosamente mi look diario, para poder combinar al mismo tiempo las nuevas tendencias con la necesidad de abrigo que me ocasionaba el frío constante. Por este motivo me fije en las botas altas over de knee, por encima de la rodilla, que al cubrir la pierna casi en su totalidad me parecían la opción más adecuada para llevar falda en días de frio. De hecho, permiten llevar una falda un poquito más corta sin que parezca de mal gusto.

Sin embargo, encontrar unas botas con este diseño que fueran acorde con mi estilo no fue fácil, porque la mayoría o llevaban mucho tacón o por su sofisticado diseño y características se alejaban de la elegancia y sobriedad que yo buscaba. Por eso este año, y en cuanto han comenzado a exhibirse las nuevas colecciones de zapatos otoño-invierno, me he puesto enseguida a buscarlas.

Y así, he encontrado un modelo completamente adecuado y que se ajusta a las exigencias que yo buscaba. Son las botas de piel elástico de ZARA que os enseño en la imagen. De un precio más que adecuado, estas botas planas, con un tacón de sólo 3 cm., tienen la altura justa para alcanzar la rodilla sin sobrepasarla en demasía. Gracias a su combinación de piel (ante) con elástico, son cómodas, haciendo fácil el gesto de poner y quitar.

Y lo mejor es la multitud de combinaciones que con este tipo de botas se pueden hacer. Desde falda tubo, corta, acampanada, con tablas; son modelos perfectos para acompañar con este tipo de calzado.

También con pantalones quedan perfectas. Eso sí, tienen que ser pantalones pitillo, que estilicen la figura y no hagan las típicas “bolsas” cuando sobreponemos las botas por encima del pantalón. Los tipo capri, de largura por encima del tobillo, suelen ser los más indicados para este tipo de look, porque al quedar ajustados, no engordan la pierna y la movilidad de la misma es completa, quedando la bota con su corte original, sin deformación alguna.

Por otra parte, con abrigos corte midi me parece otra opción más que adecuada. Un abrigo sastre de color o un chaquetón tres cuartos combinados con estas botas por encima de la rodilla, conforman otra opción casual chic muy acorde con las nuevas propuestas en moda.

Por eso, estoy deseando salir a la calle y correr a ZARA a comprármelas, ya que por su relación calidad-precio, me temo que no habrá otras y se acabarán enseguida. Si no me hago con ellas volveré a estar todo el invierno buscando de nuevo unas que me convenzan, y ¡este año no pienso hacer lo mismo!

Así que a ver si llega el otoño, y con él las ganas de cambiar de vestuario y de vestir lo último en  botas altas. De este modo podremos seguir, como siempre ¡Más que guapas!

EL PRODUCTO: BOTA PIEL ELÁSTICO color negro de ZARA, REF. 5055/301. PVP: 89,95 €. De venta en tiendas ZARA o en www.zara.com.

El primer labial con brillo que utilicé cuando me inicié en la asombrosa aventura del mundo del maquillaje fue un brillo de labios de la marca de cosméticos CLINIQUE. Era un gloss de un tono rosita claro que todavía continúa en el mercado (he de reconocer que lo llevé durante más de quince años, siempre en el mismo color), pero que a mí me encantaba por su toque discreto y su ligero acabado de brillo, que se alejaba de otros productos que se lanzaron por aquel entonces en los que el labio quedaba pegajoso para poder conseguir ese efecto brillante.

Se trataba del LONG LAST GLOSSWEAR, con SPF 15, que actualmente siguen fabricando y que tiene una duración de hasta casi 8 horas, y que año a año ha ido actualizando sus tonos para adaptarse a las nuevas tendencias. Sin embargo, el concepto de brillo de labios, y a pesar de que este de CLINIQUE cuida y protege los mismos, se convirtió en producto non grato mientras estuve en tratamiento con GLIVEC (Imanitib), viéndome en la necesidad de acudir a otros productos más ligeros, o directamente a un bálsamo reparador de labios, en concreto el que os enseñé en el post Labios de fresa, para poder paliar los efectos secundarios que esta medicación producía en forma de aftas en la comisura y borde de mis labios.

Sin embargo y aun así, no dispuesta a que una medicación alterara mi vida y mucho menos mi aspecto físico, siguiendo con mi máxima de cuidarme al máximo a pesar de las consecuencias que este agotador tratamiento médico producía en mi organismo, decidí probar otros productos que animaran mi rostro sin que resultara excesivamente llamativo, y que cuidaran mis labios al máximo.

Tras un nuevo bache con ingreso hospitalario incluido, este de menor entidad que las ocasiones anteriores, una gran amiga, experta en productos anti-alérgicos y fiel seguidora de este Blog, conocedora asimismo de mis gustos y mis ganas por recuperarme a la menor de cambio, me regaló – y qué ilusión me hizo – una versión mucho más ligera y moderna del producto que con tanto mimo había utilizado desde mi más temprana juventud, y que nada más probarlo me encantó.

Se trata del Chubby Stick Moisturizing Lip Colour Balm, también de CLINIQUE, que en su tono Nº 06 woppin’ watermelon queda completamente natural pero con un ligero tpque de brillo. Vamos, lo suficiente para lucir saludable y conseguir ese efecto buena cara ahora tan de moda y tan necesario en pacientes en tratamiento con GLIVEC (Imanitib).

Este bálsamo labial, formulado con mango y manteca de karité, se presenta en un formato que simula un grueso lápiz, por lo que su uso es fácil y cómodo. Lo mejor es que proporciona una intensa hidratación a tus labios al mismo tiempo que los maquilla con tonos neutros y naturales muy favorecedores. Disponible en diez tonos distintos, desde el tono más claro (casi transparente), pasando por distintas tonalidades de fresas, suaves fucsias e violetas, hay uno adecuado para cada tipo de piel.

Especialmente indicado y pensado para labios secos y delicados, sólo con una ligera aplicación ya notarás sus excelentes resultados, consiguiendo unos labios más suaves, hidratados, nutridos y con un brillo discreto que los iluminará sutilmente y sin llamar la atención.

Cuando quieras lucir guapa pero natural, y una vez hayas solucionado el problema de las aftas en los labios (mientras dure es importante curarlas primero antes de aplicar cualquier cosmético labial), con este producto que os propongo seguiréis estando, y a pesar de todo, como siempre, ¡Más que guapas!

EL PRODUCTO: CHUBBY SITCK MOISTURIZING LIP COLOUR BALM,bálsamo de labios de CLINIQUE. Color 06 woppin’ watermelon. Lápiz de 2 gr. PVP: 20 €. Disponible en puntos de venta autorizados o en www.clinique.es.

Una de las zonas del rostro más agradecida al maquillaje son las pestañas. No hay producto con mayor éxito que la máscara de pestañas. Es aplicarla sobre los ojos y ¡zas! realzas tu mirada como si por arte de magia se tratara.

Sin embargo, la amplia oferta de variedades a elegir impide en muchas ocasiones adquirir el producto adecuado para cada necesidad. Te abruman con distintas cualidades, que si las que dan volumen, alargan o rellenan las pestañas… Resulta imposible decantarse por una en concreto. Si además el precio varía entre unas marcas y otras, eso ya complica todavía más la elección, ya que dependiendo del día que tengas y de la asesora de belleza que te atienda (y de su don comercial), puede que te lleves la más barata o por el contrario decidas probar e innovar y acabes adquiriendo la más cara del lugar.

Llevo muchos años aplicándome máscara de pestañas. Como no tengo muchas y por mi tono de piel y cabello son bastante claras, no concibo pintarme el rostro sin maquillarme las pestañas. El efecto “antes y después”, en mi caso es notorio, y la mejora en la mirada extraordinaria. Por eso, he probado máscaras de pestañas de todo tipo: caras, baratas, y de multitud de efectos (voluminizador, alargadoras, total black…).

Sin embargo y tras la ingesta de Imatinib (Glivec), y como ya os comenté en mi primer post Más que guapa, el cuidado de mi imagen se convirtió en toda una necesidad, ya no sólo por salud, sino porque dada la composición del Glivec, tenía miedo de que en zonas tan sensibles de mi piel como la zona de los ojos y su contorno, esta medicación causara en mi alguna reacción.

Además, por el hecho de llevar gafas graduadas y de sol con frecuencia limitaba todavía más las posibilidades de elección, por lo que hoy os recomiendo la máscara de pestañas MISS MANGA de L’Oréal Paris, porque sinceramente, ha sido todo un descubrimiento. De hecho, de los últimos productos que he probado, es el que mejor relación calidad-precio he encontrado.

Y es que esta máscara de pestañas, de un negro cautivador, se caracteriza por aportar un mega-volumen extraordinario, tanto en las pestañas superiores como inferiores, lo que no es de extrañar porque ha sido creada por los expertos de L’oréal París para conseguir una mirada dulce y aniñada, a la vez que luminosa e intensa.

Con su exclusivo cepillo flexible de punta cónica, permite maquillar de una sola vez la totalidad de las pestañas, aportando, con su gruesa base y su textura de larga duración, un volumen extra, consiguiendo una definición perfecta, agrandando las pestañas de arriba y ampliando las de abajo, consiguiendo una mirada oscura y mucho más expresiva con un solo gesto.

Por otra parte y para pacientes con Glivec, con tendencia al lagrimeo y edema peri-orbital, es perfecta porque a pesar de no ser resistente al agua, no se mueve. Así que utilizando el Desmaquillador para ojos sensibles que os recomendé en el artículo con el mismo nombre, por muy poco precio y a pesar del tratamiento, podéis seguir estando, como siempre, ¡Más que guapas!

EL PRODUCTO: Máscara de pestañas MEGA VOLUMEN MISS MANGA, de L’ORÉAL PARIS. Color negro. Envase de 8,5 ml. PVP: 9,95 €. De venta en grandes almacenes como El Corte Inglés, puntos de venta autorizados o en www.loreal-paris.es

Es difícil elegir un bolso. La verdad es que los que más nos gustan por su diseño suelen ser los pequeños, pero es difícil quedarse finalmente con uno – o amortizarlo si ya lo has comprado – porque al final y cuando llegas a casa, te das cuenta de que no te cabe nada. Son tantas cosas las que tenemos que llevar…

El monedero, el billetero, las llaves y las gafas de sol, conforman el mínimo pack completo del interior de todo bolso, a lo que luego hay que añadir, dependiendo del estilo de vida de cada uno, el estuche de maquillaje, las gafas de ver, un pequeño neceser, unos guantes en invierno o un foulard, como los que os enseñé en mi post Pashminas y fulares.

Además, todavía es más difícil encontrar un bolso a la moda, que sea capaz de transportar nuestro kit de supervivencia, y cuyo precio sea adecuado. Si te compras un bolso malo, el peso de tu “carga” lo destrozará en breves días, y si te gusta cambiar de bolso resulta imposible tener cientos de bolsos de élite que satisfagan tus necesidades.

Por eso y para este soleado verano, me ha parecido de lo más adecuado este bolso que os presento de la firma BIMBA Y LOLA. De su colección OLYMPIA, y diseñado en loneta, es perfecto para poder llevar en verano todo nuestro cargamento sin perder estilo ni funcionalidad. Disponible en tres colores, rojo, amarillo y visón, mi favorito es el amarillo porque aporta luz y alegría a tu atuendo, y para la época estival combina con cualquier modelo.

De tipo “shopping”, es mi modelo favorito porque su capacidad es inmensa y no se descompensan por mucha carga que soporten. Por otra parte, sus asas cortas ajustables (bien para llevar sobre el hombro o colgado de la mano) y su saco cosido en la boca que frunce cerrando el bolso, resulta funcional a la vez que moderno. Lo más útil es su bolsillo interior plano con cremallera, que permite guardar complementos de mayor valor, como las llaves o el teléfono móvil, a buen recaudo. Y además, si llueve, como es de lona, ¡No se estropea!

De esta manera, los pacientes que están en tratamiento con Imatinib (GLIVEC), pueden añadir con toda comodidad y sin problema en sus desplazamientos diarios a lo que en el inicio he denominado “pack del bolso”, otro tipo de objetos útiles en su vida diaria como:

–          El bálsamo labial de Avene que os recomendé en el artículo Labios de fresa, para curar y paliar las molestias de las aftas de los labios.

–          La crema reparadora Cicaplast de LaRoche Posay, de la que os hablé en Crema reparadora para la piel.

–          El protector solar de Lierac del post Dile al sol.

–          El endurecedor de uñas de la marca Repavar que os enseñé en Uñas débiles.

–          El rojo de labios de larga duración de Mary Kay, del que os hablé en Lápiz de labios rojo, para estar siempre a la última.

–          Si vas al médico, tus informes, recetas o medicamentos prescritos.

Y así, y siempre con un repuesto de vuestras pastillas de Imatinib (GLIVEC) por si acaso os las tuvierais que tomar fuera de casa, ya tenéis vuestro bolso de supervivencia con glamour, y de este modo poder seguir estando, como siempre ¡Más que guapas!

EL PRODUCTO: BOLSO SHOPPING de la colección OLYMPIA de BIMBA Y LOLA. Ref. 41BBNY1P.A8032UN.PVP: 90 € (ahora de rebajas a 63 €). De venta en tiendas BIMBA Y LOLA y en www.bimbaylola.es.

Ayer estuve comiendo con mis amigas del colegio; qué momentos pasamos. La verdad es que se puede decir que por nosotras no pasa el tiempo; nos seguimos riendo de las mismas cosas – evidentemente, ninguna trascendente – y claro está, seguimos todas igual, cada una con su rol. Nos colocan el uniforme y la bata, y podrían tele-transportarnos a nuestro querido recreo, y allí seguiríamos tan a gusto.

Una de ellas, fiel seguidora de mis posts y nuestra agente de belleza por excelencia, me preguntó acerca de un remedio para el pelo. Decía que necesitaba un cambio, se lo veía más débil, cuando a decir verdad le quedaba monísimo, y con un rizo natural muy a la moda. De cualquier manera, hay veces que no sabes por qué, tu mente te indica que necesitas un cambio: de color, de peinado, de corte de pelo… Es más bien algo subjetivo, tu cerebro te está pidiendo algo más. Pero a veces, y para solucionar ese pequeño quebradero de cabeza, simplemente con utilizar un producto distinto a los que has venido utilizando hasta ahora, encuentras la solución.

Por este motivo y siempre dispuesta a resolver cualquier sugerencia que cualquiera de mis queridos lectores me podáis hacer, con el fin de hacer todo lo posible para que os encontréis, como siempre, mucho más que guapas (o guapos, que también sois muchos), me puse manos a la obra, y decidí probar un producto nuevo que sé que va a solucionar todos sus problemas.

El producto es el SERUM PHYTOKERATINE de PHYTO PARÍS. De origen vegetal, consiste en un sérum reparador del cabello, de medios y puntas, que está especialmente diseñado para restaurar el cabello dañado, estropeado y quebrado. De textura ultraligera, concentra toda la fuerza anti-rotura de la queratina en un solo producto, y resulta mágico, ya que desde la primera aplicación notas sus espectaculares efectos.

Aunque os parezca de precio un poco más elevado que el resto de productos que podáis utilizar, con aplicar sólo una pequeña cantidad del tamaño de una perla en cada aplicación sobre el cabello mojado, tras el lavado y/o acondicionado, es suficiente para lograr unas puntas sedosas y llenas de brillo, consiguiendo un cabello reparado de medios a puntas. Por eso merece la pena comprarlo, porque al requerir una mínima cantidad, puede durarte varios meses. Al principio puede utilizarlo más a menudo, hasta que tu cabello se recomponga, pero una vez restablecido, con usarlo sólo cuando la necesidad lo requiera, es más que suficiente, alargando de este modo su duración.

Y lo mejor es que también puede utilizarse sobre el cabello seco, cuando al peinarte notes que te cuesta cepillarlo, o que tus puntas se han enredado más de lo normal.

Yo lo he probado y he de reconocer que me ha encantado el resultado. Mi cabello ha adquirido más cuerpo, las puntas están completamente reparadas – parece incluso que acabo de cortarlas – y el brillo es espectacular. Y lo mejor es que ¡parece que tengo mucha más cantidad de pelo!

Como todo lo que os recomiendo, y al ser de origen natural, está testado bajo control dermatológico, así que podéis utilizarlo en cualquier situación, y en especial cuando os notéis el pelo estropeado, más débil o un poco dañado. De este modo conseguiréis una melena de escándalo, con más brillo y volumen, y así podréis seguir estando, como siempre ¡Más que guapas!

EL PRODUCTO: SERUM PHYTOKERATINE de PHYTO PARÍS. Envase de 30 ml.PVP: 23 € aprox. De venta en farmacias y parafarmacias. Más información en www.phyto.es.

No soy muy de cambiar de gafas de sol. Encuentro unas que me gustan y ya las llevo por los siglos de los siglos. Intento no comprármelas de demasiada tendencia porque yo las llevo graduadas, y con lo que me cuestan los cristales, exijo que me duren varias temporadas.

Sin embargo las gafas de sol, lejos de ser un complemento más de moda, son una estupenda solución terapéutica para cuidarte y en definitiva y en concretos momentos de tu vida, encontrarte mejor. Y es que ¿Quién ha dicho que no se puede estar mona y cuidarse a la vez?

Las gafas de sol sirven para cuidar la piel ante el sol, proteger tus ojos de posibles irritaciones tras una exposición prolongada, y evitar, sobre todo, la terrible aparición de arrugas y manchas. ¿No habéis notado que si tomáis el sol sin gafas y sin tapar los párpados, al ser una zona mucho más sensible, se te acaban incluso hinchando? Menuda manera de tomar el sol; lo hacemos para conseguir un mejor tono de piel, y acabamos con conjuntivitis, los ojos como tomates o las pestañas tan rubias como las barbies, resultando casi imperceptibles. Y si tomas una medicación como el GLIVEC, cuyos efectos secundarios se concentran más en la zona peri orbital, apaga y vámonos.

Las gafas de sol tienen otros beneficios añadidos, y es que ¿Qué mejor que unas gigantes gafas de sol para ocultar tu mala cara, sin que nadie se percate? O como hacen muchas famosas, ¿Cómo estar elegante y a la moda sin nada de maquillaje?

Eso sí, eso de llevar gafas de sol en lugares cerrados, o cuando no hace sol, está descartado. Hace un efecto muy feo encontrarte con alguien en un bar, por ejemplo, y que no se quite las gafas de sol. ¡Es que no sabes a dónde mira! Es por eso por lo que se llaman “de sol”, porque están diseñadas para cuando hace sol. Para el resto de momentos, están las gafas normales, las del cristal transparente, las de toda la vida. Así que las de sol, para cuando estés al aire libre y haga bueno, no para cuando llueva, evidentemente. No he visto nada más ridículo que llevar gafas de sol cuando está a punto de diluviar, o en pleno invierno con niebla (y creedme, las he visto).

Y otra cosa muy importante: Las gafas de sol, son unas gafas, no una diadema. Para retirar el pelo están las cintas de pelo, las diademas, y ahora incluso hasta las coronas de flores. Poniéndoos las gafas de sol en la cabeza sólo conseguiréis extender las patillas, y después que las gafas se resbalen sobre vuestra nariz cuando os las tengáis que poner por necesidad, cuando efectivamente, haya sol. ¡Hay que cuidarlas! Por eso, para el pelo, los accesorios del pelo, y en la cara y para proteger los ojos y el contorno de los mismos, las gafas de sol.

Pero no todas las gafas de sol sirven para todo esto. Para proteger tus ojos y tu piel, lo importante es que sean de gran montura. Eso sí, no que parezcas una mosca; han de ser adecuadas al tamaño de tu cara y fisionomía. Que a la modelo de la foto le quedan muy bien en el anuncio, pero tú no eres la modelo de la foto – ya quisiera ella ser como tú – y el photoshop está a la orden del día. Así que en ese caso, déjate aconsejar por los expertos de tu óptica de confianza, y elige unas que se adapten a tu estilo, y sobre todo, aquéllas con las que te encuentres cómoda y estupenda.

A mí las que más me gustan y reúnen todos estos requisitos, son las GAFAS DE SOL de la firma PRADA. De tamaño extra grande pero de diseño exclusivo y discreto a la vez, conseguirás un look a la última protegiendo tu piel y tus ojos al mismo tiempo. Mis preferidas son las de acetato color negro, con detalles metálicos retro y toque contemporáneo, como el modelo SPR16Q_E1AB_F00A7 que os adjunto. Además, por sus lentes degradadas de color gris oscuro y azulón, son perfectas para los días de sol, y su durabilidad es incomparable.

Y mi último consejo: No escatiméis a la hora de compraros las gafas de sol; elegidlas buenas. Tenéis que pensar que no son un complemento de moda más, como pueda ser un anillo o un reloj. Su efecto terapéutico es increíble, pero para conseguirlo, deben ser de calidad. Es invertir en salud. Así que lanzaros a compraros unas, si es que todavía no las tenéis, y así podréis seguir estando, como siempre ¡Más que guapas!

EL PRODUCTO: GAFAS DE SOL, modelo SPR16Q_E1AB_F00A7, de PRADA. PVP: 230 € aprox. De venta en ópticas y puntos de venta autorizados, o en www.prada.com.

Es necesario hacer deporte. Me ha costado mucho tiempo darme cuenta, y he tenido que aprender a sobrellevar los efectos secundarios del Imatinib (GLIVEC) durante casi tres años y recuperarme de la operación del GIST para darme cuenta de los beneficios que conlleva el movimiento continuado.

Nunca me ha gustado hacer deporte. El estudio pormenorizado para especializarme en mi profesión, el gusto por la moda o el maquillaje, la lectura y la cultura en general han completado siempre tanto mi tiempo de trabajo como de ocio. Sin embargo, el deporte nunca entraba dentro de mis planes. Eso de añadir a mi apretada agenda una actividad de esfuerzo y que a su vez provocaba cansancio no me convencía nada. Es más, durante mi juventud practiqué regularmente algún deporte que se me daba relativamente bien, pero con el paso de los años la pereza y la atención hacia otro tipo de distracciones hizo que me olvidara de ello por completo.

En mi artículo Glivec, efectos secundarios, os comenté que uno de los efectos más adversos en mi caso fue la fatiga extrema. Sí, una fatiga desorbitada, casi desesperante, que repentinamente me impedía poder moverme, e incluso dificultaba mi respiración. Dicha fatiga se manifestaba rotundamente al finalizar el día, pero me causaba tal desazón interior que puedo concluir sin duda alguna que ha sido lo más difícil de sobrellevar durante todo este tiempo.

Con el paso de los meses, y gracias al cuidado de mis médicos y la adopción de nuevos hábitos de vida, dicho malestar ha ido desapareciendo, aunque ciertamente reconozco que aparece de vez en cuando si altero la normalidad y rutina de mi vida. Me salgo de lo que yo denomino coloquialmente sota, caballo y rey, y el cansancio desmesurado vuelve a aparecer.

Sin embargo, he descubierto, y gracias a la insistencia de mi marido, que hacer deporte ha mejorado sustancialmente mi calidad de vida. Cuando te encuentras siempre cansada, la primera medida que adoptas directamente es tumbarte en el sofá en cuanto tienes cinco minutos libres de tu tiempo (yo sólo tengo cinco, no más). Aprovechas todo tu tiempo libre para descansar, sin darte cuenta que la inactividad incrementa tu cansancio todavía más.

Hacer deporte ha conseguido, por un lado, que me vuelva a sentir mentalmente sana. Sí, sana, porque en primer lugar puedo hacer un esfuerzo físico similar al que hace el resto del mundo, lo cual me equipara a ellos, que no toman mi medicación. Por otro lado, ha servido para que mi organismo se reorganice, elimine la toxicidad de mi cuerpo con el sudor a la vez que fuerzo mi cuerpo y fortalezco mis músculos (que habían perdido mucha masa muscular), con lo cual he conseguido, poco a poco, ir recuperando las fuerzas perdidas. Pero lo mejor es que haciendo deporte – con moderación, evidentemente, y junto a mi otra costilla – hace que me sienta libre, recuperada y feliz.

Por otra parte y para este proyecto de it girl, no ha sido nada fácil encontrar un modelo adecuado para retomar la actividad física. Evidentemente las ganas de volver a hacer deporte eran muy pocas, así que me busqué una excusa que me animara a hacerlo de nuevo. Y cómo no, esa fue la elección de la ropa que iba a utilizar.

No pensé que fuera tan difícil encontrar algo que me gustara. Entre que el deporte no me apasionaba en absoluto y la ropa para realizarlo me parecía más que horrible (y es que cuando una no es experta, eso es lo que pasa), emprendí un nuevo camino hacia la búsqueda deL modelito adecuado que incentivara mi vuelta a la actividad física. Y así, encontré esta camiseta tan ideal que ha conseguido que vuelva a coger una raqueta con estilo y con glamour, y que quiero compartir con vosotros.

Es la camiseta de tirantes RELOAD, de ADIDAS. Su diseño, con corte entallado, espalda deportiva y escote, decorada con grandes topos, hizo que me encantara nada más verla. Si a eso añades la tecnología de secado rápido y específica para entrenamiento Climalite®+, exclusiva de ADIDAS, que aúna la comodidad informal y suave con el secado rápido de un tejido técnico, la hace comodísima y perfecta para comenzar a entrenar.

Su tejido de punto simple 100% poliéster y de uno de mis colores favoritos, el morado, junto con su gran logotipo amarillo ADIDAS en contraste estampado en el lateral izquierdo, ha conseguido que mi vuelta al ruedo sea exitosa y seguir estando, como siempre ¡Más que guapa!

1)      EL PRODUCTO: CAMISETA DE TIRANTES RELOAD, de ADIDAS, Color Tribe Purple. PVP: 26 €. De venta en tiendas ADIDAS, puntos de venta autorizados y en la web de Adidas.

Cuando una se levanta con mala cara, por no haber tenido un sueño reparador, estar enferma, bajo tratamiento médico, preocupada o simplemente cansada, el sitio del rostro en el que dicho malestar se refleja con mayor rotundidad es en los ojos. Bueno, más bien justo debajo de ellos. En estas ocasiones, las malditas ojeras siempre hacen su presencia.

Por dicho motivo, el corrector es uno de esos productos que no deben faltar en nuestro kit de maquillaje, ya que con una pasada y como si de un truco de magia se tratara, consigue cambiar completamente tu aspecto tornándolo en luminoso y saludable. Sin embargo, elegir un buen corrector de ojeras no siempre es fácil; nos bombardean con multitud de marcas, texturas y colores que no siempre ayudan a hacer una buena elección, por lo que ese efecto mágico del comúnmente denominado “tapaojeras” puede incluso empeorar más las cosas.

Por eso, los mejores correctores para estos casos son los de la marca de cosmética BOBBI BROWN, quien con la destreza y elegancia de sus técnicas de maquillaje elevó a este producto a las alturas, convirtiéndolo en un indispensable para toda mujer.

De los distintos tipos de corrector que presenta BOBBI BROWN, el que más me gusta es el Tinted Eye Brightener, por su textura ligera, que no apelmaza, y porque además al mismo tiempo proporciona un efecto iluminador. Por ello, elimina los rastros de cansancio al mismo tiempo que da luz a tu mirada, con lo cual es resultado es perfecto.

Se presenta en un tubo transparente con un aplicador tipo pata de venado para una aplicación más precisa y controlada. Del mismo formato que el típico gloss, puedes llevarlo contigo a todas partes si consideras que necesitas un retoque, aunque su fórmula permanente hace que quede intacto durante más de seis horas.

El efecto es sublime porque Ilumina la zona sombreada de la ojera al instante, cambiando su tonalidad en otra más saludable, dando un aspecto al rostro fresco y reanimado, listo para continuar con el maquillaje habitual.

Con diez tonos distintos para elegir, para mi tipo de piel clara mi tono favorito es el Light Bisque Nº 2, porque además funde muy bien y su resultado es prácticamente imperceptible. No obstante, mi consejo es que cuando vayáis a elegirlo la asesora que os atienda intente probarlo sobre vuestra propia piel, para conseguir un mejor efecto.

Un consejo: cuando estéis decidiendo el tono que vayáis a adquirir, no olvidéis que debe coordinar con el tono de la base de maquillaje a aplicar en el resto del rostro. Queda horroroso aplicar un corrector de ojeras que aclare demasiado, si además el tono de maquillaje es oscuro, o al revés. Es un producto que debe quedar completamente natural, debiendo fundirse al máximo con nuestro tono de piel, o de lo contrario se conseguirá el efecto completamente contrario a lo que se pretende.

Desde que lo descubrí, yo no puedo vivir sin mi corrector, porque te ocurra lo que te ocurra, el efecto buena cara debe prevalecer, para poder seguir así, y como siempre, ¡Más que guapa!

EL PRODUCTO: Tinted Eye Brightener, de BOBBI BROWN COSMETICS. Tubo de 6ml. PVP: 23 € aprox. De venta en puntos de venta autorizados, en los corners de la marca en El Corte Inglés o en www.bobbibrowncosmetics.com

Como ya os comenté en el primer capítulo, Más que guapa, hace tres años me diagnosticaron un GIST (tumor de estroma gastrointestinal). En mi caso estaba localizado junto al estómago, por lo que los especialistas que me trataron decidieron que la mejor solución era quirúrgica (excelente decisión), pero ello conllevó que al extirparlo debieran hacerme una resección subtotal de estómago.

La extirpación del tumor fue total, pero con carácter coadyuvante se decidió asimismo que sería aconsejable el tratamiento con Imatinib (GLIVEC) durante aproximadamente tres años, a la vista de los últimos estudios que habían aparecido y que demostraban la efectividad de esta medida para evitar la reaparición del tumor.

 Por dicho motivo, ahora y casi en la recta final, puede decir muy orgullosa que llevo casi tres años en tratamiento con Imatinib (GLIVEC), y que por fin he podido sobrellevar sus efectos secundarios. Con franqueza he de reconocer que no siempre ha sido fácil; a pesar del largo elenco de efectos secundarios que se relatan en el prospecto de la medicación, lo cierto que es que ni todos los he padecido, ni lo que inicialmente me comentaron que me podía ocurrir (edema perio rbital e hinchazón de los tobillos) concurrió en su totalidad.

He de decir que el desconcierto y la desinformación generalizada existente con respecto a este tratamiento (a favor de los médicos diré que es un tratamiento muy exitoso pero a su vez novedoso y reciente), unido al hecho de que cada organismo reacciona de una manera, y que la vida cotidiana que uno lleva influye también en la reacción del paciente a la medicación, llevó a desconcertarme y a desesperarme en multitud de ocasiones. En mi caso tuve la suerte de rodearme de excelentes amigos médicos, que me conocen a la perfección, y que se desvivieron por orientarme de la mejor manera posible para poder paliar o al menos reducir los efectos adversos que en mi caso la medicación producía, y hacerlo compatible con la continuidad de mi vida privada.

En este blog voy intentando contar esos pequeños truquillos que durante este tiempo he ido recopilando y que me han dado un buen resultado, y así tengo la intención de seguir, pero ante la falta de información existente, y para todos aquellos que estéis en la misma situación, he considerado conveniente hacer una relación de los efectos secundarios más comunes tras la ingesta del Imatinib (GLIVEC). Por un lado, porque considero que cuando se conocen, se sabe su origen y ves que le ocurre a alguien más se sobrellevan mejor. Por otro, porque antes de dar una solución al respecto se hace precisa la determinación de las molestias a paliar.

Después de mucho autoanalizarme y buscar información al respecto hasta llegar a límites insospechados, estos son los efectos secundarios que están descritos como más comunes y a los que en mi caso he ido haciendo frente durante todo este tiempo:

• Edema peri orbital o hinchazón alrededor de los ojos (Para paliarlo, ver los artículos Contorno para ojos hinchados y Desmaquillador ojos sensibles).
• Incremento del lagrimeo.
• Intolerancia al frío (encontraréis soluciones en los artículos Solución al frio en casa y en Manta para el sofá).
• Fatiga extrema, en determinados momentos del día, en especial al caer la noche.
• Calambres musculares.
• Acidez, indigestión, vómitos o malestar estomacal.
• Diarreas leves.
• Aftas en la boca y contorno de los labios (Ver artículo de Labios de fresa).
• Ligeros cambios de peso.
• Bajada de defensas.
• Dolores musculares.
• Ansiedad.

Como veréis, hay todavía mucho que desarrollar, pero a través de estas líneas y en próximas ediciones (cómo paliar los efectos secundarios) intentaré dar solución a todos y cada uno de estos efectos tan molestos y que en muchas ocasiones impiden poder retomar tu vida normal.

En el artículo Labios de Fresa ya os hablé de un remedio estupendo para las aftas que pueden salir en los labios como consecuencia de una bajada de defensas tras el tratamiento con Imatinib (Glivec), consecuencia de un GIST o bien de una leucemia mieloide crónica (LMC).

Esas aftas, al igual que otro tipo de irritaciones en la piel, pueden dejar temporalmente marcas en incluso pequeñas cicatrices, difíciles de evitar y que pueden tardar incluso un tiempo en desaparecer. Si además dichas señales se encuentran en el rostro, la molestia es mayor, por lo que la existencia de una solución se precisa como inmediata.

Por este motivo, y como complemento a lo anterior, hoy os quiero recomendar una crema reparadora estupenda, casi milagrosa, y de un precio estupendo. Se llama CICAPLAST BAUME B5, de Laboratorios Dermatológicos LA ROCHE-POSAY. Es una crema que sirve tanto para calmar como para reparar cualquier tipo de alteración epidérmica del día a día, y que además favorece la recuperación de la piel sensible o alterada e irritada.

Actúa como un acelerador de la reparación epidérmica, y sirve asimismo para cuidar y reparar la epidermis dañada por irritaciones, pequeñas heridas e incluso reacciones solares adversas. Todo ello gracias a que combina Pantenol, Madécassoside y agentes antibacterianos que limitan la proliferación de bacterias, por lo que ejerce, además, un poder curativo.

Como no contiene parabenes ni perfume, es ideal para todo tipo de pieles, incluso para las más sensibles o atópicas. Apta para toda la familia, tanto para bebés, niños y adultos, su textura suave y ligera hace fácil su aplicación, y los efectos son casi inmediatosgracias a su invisible textura efecto apósito con agentes antibacterianos.

Formulado como un bálsamo ultra confortable, su efecto multi-reparador favorece la recuperación de la piel sensible sin dejar rastro de los daños epidérmicos. Con un acabado no graso ni pegajoso, lo mejor es que se absorbe rápidamente, lo cual permite un uso continuado sin dejar restos.

Resultado: una piel completamente reparada que a su vez recupera el confort y el alivio necesarios que exigen las pieles más sensibles.

Los expertos de LA ROCHE-POSAY recomiendan, para un resultado óptimo, aplicarla dos veces al día sobre la piel limpia y seca, tanto en el rostro, labios y cuerpo, evitando eso sí el contacto con los ojos.

En el caso de las aftas, mi aplicación era continua, mañana, tarde y noche y a demanda. En cuanto notaba una ligera sequedad en la piel volvía a aplicarla, de manera que la zona dañada, en especial los labios, quedara siempre cubierta, y así conseguí curarlas y hacer desaparecer la marca que tras su marcha dejaban las molestas erupciones. Para otro tipo de irritaciones en la piel he seguido el mismo sistema y ha resultado fantástico.

De hecho, desde que la descubrí la llevo siempre en el bolso (su tamaño de 40 ml no ocupa nada), y en cuanto noto la menor molestia en la piel me la aplico sin problema sobre la marcha, así que por fin he podido decir adiós a las irritaciones y lesiones en la piel, y seguir, como siempre, ¡Más que guapa!

EL PRODUCTO: CICAPLAST BAUME B5, de Laboratorios Dermatológicos LA ROCHE-POSAY

Tubo de 40 ml. PVP 9 € aprox. De venta en farmacias y parafarmacias. http://www.laroche-posay.es/